Apenas unos meses después de la legalización del cannabis en algunos lugares de Estados Unidos, la vida de los amantes de la marihuana comenzó a ser (si cabe) un poco más dulce. Se cuentan por decenas las empresas que se dedican de forma exclusiva a fabricar y comercializar todo tipo de productos alimenticios con un toque de marihuana.
La legalización de la marihuana en diversos países, y especialmente en algunas regiones de Estados Unidos, no ha tardado en despertar nuevos deseos y necesidades en la comunidad cannábica. Más allá de poder acceder a un producto terapéutico como aquel, o de hacer un uso recreativo de él, los amantes de esta planta quieren saborear – literalmente – el éxito de la legalización tras años de intensas luchas.
Hace casi un año, las primeras empresas de bebidas y dulces empezaron a asomarse al nuevo mercadolas primeras empresas de bebidas y dulces empezaron a asomarse al nuevo mercado, entre ellas algunas como DixieElixirs o Cheeba Chews. Hoy sus productos comparten estanterías con todo tipo de chocolatinas, pasteles, cereales, bebidas isotónicas y hasta cerveza con un toque de marihuana. Eso sí, es una industria pensada especialmente para gente dulce (y golosa).
Aunque en sus inicios estos productos estaban pensados para los pacientes de cannabis medicinal, y actualmente aún se comercializan destacando su potencial terapéutico, cualquiera puede animarse a probar las mieles de la gastronomía cannábica. Solo en Estados Unidos hay más de 150 empresas dedicadas a esta industria.
La nombrada Cheeba Chews sigue siendo una de las mayores empresas del sector en EE.UU. Con cinco dispensarios repartidos por Colorado, se ha hecho célebre tras ganar en tres ocasiones la prestigiosa Cannabis Cup gracias a sus pequeños dulces, unos caramelos comestibles con diferentes toques de CBD y THC (con propiedades relajantes o energéticas, y de sabor a frutas o caramelo puro). La empresa sigue aconsejando a los usuarios que antes de ingerir su producto lo consulte con un médico.
Para los amantes del chocolate, Kiva Confections comercializa una elegante variedad de tabletas, onzas y pequeñas grajeas de este producto (más de una docena de variedades) condimentadas con cannabis. Es una de las empresas más prestigiosas de California ligadas a la marihuana terapéutica y trabaja con los mejores chocolateros locales y con cultivadores de cannabis asociados que certifican la calidad del producto.
Su intención, al igual que la de Bhang Chocolate, no es solo ofrecer un simple comestible, sino también garantizar que los consumidores se sientan seguros de lo que se llevan a la boca. Por eso, ambas han convertido sus delicias en surtidos demandados tanto por pacientes como por consumidores normales. Bhang Chocolate, de forma exclusiva, ofrece productos 'gourmet' (a unos 17 euros cada unidad) en Michigan, Colorado, Arizona, Nuevo México y California.
Para los más nostálgicos (y esos que quieren un toque tradicional en todo lo que compran) Auntie Dolores pone sobre la mesa diversos alimentos cannábicos diferentes, desde 'brownies' a galletas, palmeras, cacahuetes con chili, palomitas de caramelo y bollos de queso con diferentes grados de THC. Todos ellos con indicaciones sobre efectos, nivel de psicoactividad y recomendaciones sobre cuándo y cómo degustarlos.
Si te quedas con hambre, el grupo Minerva Canna Group vende desde barritas de arroz cannábico hasta tarta de queso (con toques de Indica) o pastel de limón (con Sativa). Productos que cuestan entre ocho y nueve euros la unidad. Un manjar perfecto para el postre (¿has visto qué buena pinta?).
Hay comestibles para todos los gustos y necesidades: desde alimentos sin gluten para celiacos hasta productos con certificado kosher para los judíos. De eso precisamente se encarga Julie´s Baked Goods, que fabrica y comercializa diferentes tipos de mantequilla con extractos de la planta de la marihuana, que también emplea para condimentar creaciones propias como copos de avena (pensados para el desayuno); mezclas de pipas de girasol y calabaza; pequeños bocaditos de almendras, jarabe de arce y canela o barritas de coco. Seguro que nunca antes habías visto tanta variedad de productos aliñados con la sal de tu vida.
Las bebidas también tienen cabida en la nueva oferta de variedades cannábicas. Legal, "el desayuno de los campeones", es un café con extracto de marihuana (concretamente, con 20 miligramos de THC) que Adam Stites distribuye a través de su propia compañía (Mirth Provisions).
Es todo un éxito, pero si pensabas que lo habías visto todo, te equivocabas: cervezas, como la alemana Cannabis Club Beer, la italiana The Club Sud o la Euphoria Cannabis Beer empiezan a abrirse camino. También las bebidas energéticas, el té, los batidos de cacao con sabor a variedades (especialmente a Haze) e incluso los 'chupa-chups' (para que recuerdes tu infancia) colman el mercado.
Dixielixirs es una de las compañías que más variedad de zumos y refrescos pone en tu nevera, siempre pensados para quienes quieren "divertirse" y paladear el cannabis de una forma diferente y en compañía de otros manjares. ¿Por qué no bebiendo una copa? O incluso, tomando una infusión con extractos de marihuana.
Ahora endulzarse la vida es más fácil. Muchos llevan años soñando con poder ver tranquilamente una película mientras beben, por ejemplo, un zumo de cannabis (con aroma a melocotón, sandía o zarzaparrilla) y come unas deliciosas palomitas a las finas hierbas. Ese día ha llegado: tendremos que empezar a añadir productos a nuestra lista de la compra. ¿Se animarán los concursantes de MasterChef a hacer cocinar alimentos parecidos?