Un día como el 13 de agosto, pero de setenta y dos años atrás, nació Howard Marks, uno de los mayores activistas de la marihuana en el mundo. Un título que siempre llevó con orgullo. Cuando en su etapa universitaria probó el cannabis, al que denominó “oro verde”, nunca pensó que se dedicaría a la planta en cuerpo y alma hasta el día de su muerte, el 10 de abril de 2016. Te contamos la historia de esta leyenda.

Howard Marks siempre tuvo inquietud por adquirir una buena formación. En 1970 contaba con estudios en Ciencias Naturales por la Universidad de Oxford, de Física por la Universidad de Londres y de Filosofía de la Ciencia por la Universidad de Sussex. Casi al final de esta trayectoria académica tuvo lugar un suceso que cambiaría su vida: probó por primera vez la marihuana. Le dio un poder espiritual gigantesco y lo apodó “oro verde”. Desde entonces se propuso que todo el mundo pudiese acceder y disfrutar de ella, así que poco a poco fue convirtiéndose en un as de la distribución de cannabis.

Durante estos años jóvenes, su habitación en el Balliol College de Oxford se convirtió en un refugio para los fumadores de la planta. “Fumé hachís todos los días durante los siguientes 22 años”, escribió tiempo más tarde. A partir de este momento, no tardaría mucho en dar los primeros pasos hacia el comercio de cannabis. "Empecé a vender en Londres, moviendo alrededor de 100 kilos a la semana, que era bastante importante en esos días”, declaró en una ocasión.

Se dice que, durante su carrera, ha llegado a tener 43 apodos y más de 80 líneas telefónicas. En 1988, mientras vivía en Mallorca, fue detenido por la estadounidense Administración para el Control de las Drogas (DEA, en inglés), debido a las políticas prohibicionistas en aquel país, y trasladado a la prisión Terre Haute del estado de Indiana. "La más dura de Estados Unidos", afirmó Marks. Fue condenado a 25 años de cárcel, pero quedó en libertad condicional al cumplirse los siete años de su entrada por comportamiento ejemplar y entonces se convirtió en una de las voces más destacadas por la legalización de la marihuana.

Durante su período entre rejas no perdió el tiempo: escribió su autobiografía, que lleva por nombre Mr Nice, el mote por el que era conocido entre sus clientes debido a su personalidad carismática (‘nice’ es ‘simpático’ en inglés). Publicado un año después de su salida de la cárcel, el libro se convirtió en un ‘best seller’ y recogía sus comienzos en el mundillo, así como el relato de hechos que involucraban a algunos funcionarios del MI5 (el servicio secreto británico) dedicados a su negocio. En La Mota puedes encontrar este libro tanto en español como en francés.

Tras este ‘boom’ editó una antología de relatos llamada ‘The Howard Marks Book of Dope Stories’ (2001), que recogía títulos de autores tan variados como él mismo, Alejandro Dumas, Charles Baudelaire y Hunter S. Thompson. Años más tarde escribió una continuación de su autobiografía, ‘Mr Nice: Straight Life From Wales to South America’, que, a diferencia de la primera parte, se centra más en explorarse a sí mismo. También tiene una película sobre su vida, ‘Mr Nice’, una coproducción de Inglaterra y España estrenada en 2010 y que está protagonizada por el actor británico Rhys Ifans.

Activista y mucho más

Marks no solo fue comerciante y activista: su vena polifacética le llevó a abarcar otros campos. Trabajó en la industria de la música después de participar en la canción de 1999 ‘Hanging with Howard Marks’ de Super Furry Animals, llevó la dirección de la discográfica Bothered y fue DJ. Tuvo una carrera como conferenciante dando charlas sobre su vida como activista y hasta protagonizó un espectáculo de comedia, ‘An Audience with Mr Nice’. Además, trabajó como columnista en la revista ‘Loaded’ durante cinco años.

Tras salir de la cárcel fue elegido parlamentario británico en las elecciones de 1997 y se esforzó en su activismo por la legalización del cannabis, presentando un proyecto para ello. En una entrevista de 2015, en la que reveló que le habían diagnosticado cáncer de colon incurable, afirmó que “la legalización de la marihuana con fines médicos es bienvenida”. Y añadió: “Pero nunca quise esperar hasta tener cáncer para poder fumar legalmente”. Le complacía ver que en varios estados de Estados Unidos habían legalizado el consumo recreativo de la planta: para él era el último lugar en el mundo que lo haría, tras sus experiencias en la cárcel de aquel país.

El 10 de abril de 2016, la enfermedad pudo con él a sus 70 años. En sus últimos días, insistió en que nunca había consumido drogas ni había sido parte de la violencia. “Soy un viejo jipi”, decía.

El 13 de agosto es el aniversario de este mito de nuestra planta favorita. ¿Por qué no celebrarlo como se merece leyendo su historia? LaMota cuenta también con una edición especial en francés que, además de su biografía, incluye 130 fotografías. Mr Nice no podría tener otro homenaje mejor que ese.