¿Cómo imaginas la vida en otro planeta? Para muchos, es un sueño con el que fantasear desde bien pequeños. Para otros, es imposible mantenerse lejos de los suyos y de las virtudes de la Tierra para salir volando al espacio exterior. Pero seguro que más de uno se sorprende al saber que no tendría que despedirse de la marihuana. Según un astronauta británico, podría cultivarse en Marte.  

La marihuana podría crecer en el planeta rojo. Así lo ha señalado Ryan MacDonald, un astronauta procedente de Reino Unido y uno de los cinco finalistas para hacer un viaje sin billete de vuelta a Marte, dentro de la llamada misión Mars One.

Se trata de un proyecto liderado por el investigador holandés Bas Lansdorp con el fin de establecer una colonia humana permanente en el planeta rojo. En este contexto, MacDonald, estudiante de Física de la Universidad de Oxford, ha sugerido que el mismo sistema utilizado para cultivar los alimentos podría emplearse para el crecimiento de las plantas de cannabis.

La razón se encuentra en los cultivos hidropónicos. Este método de cultivo, desconocido para muchos cannabicultores, guarda múltiples beneficios para nuestras plantas. Consiste, básicamente, en un cultivo sin suelo, por lo que no necesita los nutrientes que aporta la tierra. En sustitución, las raíces crecen y se desarrollan ancladas a un medio o sustrato inerte, como la arlita (arcilla expandida) o la lana de roca. Los nutrientes, por su parte, se añaden al agua o al sustrato a través del riego. Esta técnica también se utiliza para cultivar frutas y verduras y podría ser de gran utilidad en el planeta rojo, donde la naturaleza no ofrece tantas ventajas como en nuestro planeta. 

Pero MacDonald no es el único que ha pensado en teñir de verde los rincones de Marte. El director de la Facultad de Ciencias Medioambientales de la Universidad de Guelph (Canadá), Michael Dixon, lleva años tratando de perfeccionar las técnicas de cultivo automatizadas para conseguir resultados a medida.

El principal escollo de Dixon radica en la financiación, que no es suficiente para diseñar, construir y mejorar sus sistemas. Dado que la mayoría de las empresas no planean un traslado extraterrestre a corto plazo, solo la industria del cannabis ha invertido en este tipo de mecanismo para que sus plantas puedan crecer en la Tierra, o en Marte si así lo prefieren.

Según Peter Reynolds, líder de la campaña a favor del cannabis Clear, los astronautas podrían beneficiarse de los efectos de la planta en el espacio: "Para muchas personas, el cannabis tiene una dimensión espiritual y promueve la relajación, así como la unidad con la naturaleza y con otras personas". Unas sensaciones que podrían ser muy útiles en una misión como esta, en la que los tripulantes de la nave espacial prevén permanecer lejos de sus hogares, sin albergar la esperanza de volver a ver a sus seres queridos.

Aunque la finalidad de Mars One parece imposible y extremadamente cara (poner los cuatro primeros astronautas costaría 6000 millones de dólares, unos 5400 millones de euros), la idea de cultivar cannabis en Marte abre la puerta a multitud de posibilidades con las plantas. Mientras tanto, los que preferimos vivir en el planeta azul podemos contentarnos con los buenos momentos que nos ofrece la hierba, sin tener que explorar el espacio sideral para ratificar sus cualidades.