Esconde, aumenta y diseña tu cultivo con el sistema LST (Low Stress Training)

El sistema LST nos permite moldear el crecimiento de las plantas a voluntad y aumentar su desarrollo horizontal. Lo consigue gracias a un sencillo sistema de anclajes, que 'engañan' a la planta para que sus hormonas de crecimiento se redistribuyan entre las ramas laterales. Si se hace bien, es un sistema inocuo. A diferencia de otros métodos, basados en el corte Top Cola (en la punta principal), como la poda apical o la poda FIM, que provocan a las plantas un estrés inconveniente.

Aumenta la producción y reduce el tamaño 

Las cuerdas del método Low Stress Training permiten camuflar nuestro cultivo y potenciar su producción. Se trata de un sistema que imita el efecto de la poda apical (que redistribuye la 'fuerza' de la plantas hacia las ramas secundarias). Pero, que a su vez, no las estresa tanto porque no implica ningún corte o amputación. Y que genera un crecimiento horizontal, al redirigir la mayoría de los recursos de las plantas a los tallos secundarios, gracias al efecto de un sistema de anclajes.

Cambiar una punta principal por una miríada de subcolas aumenta los niveles de producción.

Con el uso del LST de la weed se pretende controlar la altura, pero sobre todo maximizar la energía lumínica que reciben las plantas. En un cultivo con este sistema, la luz se distribuirá de manera mucho más pareja entre los brotes, provocando un crecimiento más rápido y homogéneo de los cogollos. Su uso es especialmente interesante en los cultivos de interior, donde veremos cómo aumenta la eficiencia de nuestros focos. Hasta tal punto que podremos sacar un gratificante ciclo de siembra más por año. 

Cómo aplicar la técnica del 'Low Stress Training'

Para aplicar el LST correctamente hay que empezar a trabajar con las plantas cuando tengan un tamaño de cuatro internudos. Antes, son demasiado sensibles y podrían morir durante el proceso de anclaje; después también sería arriesgado, porque el tallo ya empieza a ser duro y quebradizo. Es precisamente ese brote central, que contiene la mayor parte de las hormonas y células de la planta, el que se tendremos que atar a la maceta antes de llegar a las yemas del último internudo.

Un guiado progresivo en forma de espiral es la opción más rentable para aplicar el LST. 

Esta operación provocará que la punta se curve horizontalmente, creando un eje paralelo con el tiesto y produciendo un cambio hormonal que enviará energía a las zonas secundarias. Como consecuencia, éstas áreas periféricas empezarán a agigantarse con un efecto similar al que producía la predecesora técnica del del Super Cropping (Super Cosecha). Aunque, creándole mucho menos estrés a las plantas. Y lo más importante: podremos moldear la apariencia del sembrado a voluntad.

Da forma a tus plantas y diseña tu cultivo

El método LST no sólo te ayuda a controlar el tamaño y la producción de tus plantas, sino que también te permite darles un diseño propio. Poco después de que realicemos el primer anclaje, las puntas de las plantas crecerán hacia arriba de nuevo. En ese momento, tendremos que realizar un segundo anclaje. Y poco tiempo después un tercero. Y un cuarto. Que irán moldeando la forma de las plantas, permitiéndonos guiar su crecimiento a medida que vamos anclándolas en los tiestos.

Creciendo desde un eje horizontal, todos los brotes tienen acceso a la misma cantidad de luz. 

Cuando empecemos a colocar los primeros amarres, tendremos que decidir qué apariencia le vamos a dar a nuestra planta. Podemos ir atando sucesivamente los nudos de amarre a los brotes más destacados, o guiar a los tallos principales para crear plantas con formas geométricas (en espiral, o candelabro, por ejemplo). Lo realmente crucial es que metamos en un 'corsé' de cuerdas a los tallos más importantes para que las hormonas de crecimiento se redistribuyan entre todos los brotes.

¿Cómo tener éxito con el low stress training?

Conseguir coronar con éxito un cultivo con el trenzado de bajo estrés (LST) no es especialmente complicado, pero se deben tener en cuenta algunos factores. En primer lugar, hay que utilizar tutores en las ramas secundarias que se hiperdesarrollen (como consecuencia de los anclajes) para que puedan aguantar el peso de los cogollos y de la lluvia. Además, hay que vigilar la unión entre el tronco y esos brotes, aplicándoles pasta cicatrizante si vemos indicios de rotura o de daño.

Un trabajo de ligamiento y guía exitoso empieza siempre desde los primeros estadio del cultivo. 

Las plantas y el moho son otro de los puntos que deben cuidarse, si queremos cultivar con el Low Stress Training. Porque al utilizar éste método, se crean plantas muy achaparradas y con mucha vegetación; el blanco ideal para el ataque de las epidemias y la botritis. Por eso, es mejor utilizar sativas híbridas (son menos tupidas) como la Black Jack, la Santa Sativa o la OG Kush. Que además, soportarán mejor los amarres porque sus tallos son más flexibles que los de las indicas.

Crea, diseña y oculta una supercosecha

El sistema LST (junto con otros métodos de poda apical) nos permite cosechar cogollos de la mejor calidad. Desarrollando, además, una estrategia de discreción para camuflar nuestro cultivo. Todo, gracias al efecto que producen los amarres y las guías en el desarrollo del cultivo. Su acción facilita que la planta deje de enviar hormonas inhibidoras a los brotes secundarios. Y que en su lugar, redistribuya todo el potencial de crecimiento que tenía reservado para el tallo central.

Si se dan las condiciones, todos los nódulos de crecimiento puede desarrollarse como una punta.

De esta manera, se irán generando un pléyade de puntas en lugar de una gran cola central. Lo mejor es que podremos repetir este proceso en todos los tallos, a medida que las plantas van creciendo. Además de dirigir este crecimiento desacostumbrado en la dirección que más nos convenga. Eso, nos otorgará la posibilidad de crear cultivos que se amolden perfectamente a nuestras exigencias de espacio. Y que mientras lo hacen, estén generando cantidades extra de flores y tetrahidrocannabinol.