El banco de semillas español acaba de presentar una nueva genética que se añade a su catálogo de semillas feminizadas: Gorilla, una variedad de cannabis híbrida pero con unos efectos propiamente indicos, que ha triunfado en todo Estados Unidos y que cuenta con un amplio reconocimiento a nivel internacional. Y no solo por su capacidad para producir resina, un aspecto en el que es difícil encontrarle rival, sino por su potente efecto, con unos niveles de THC que pueden llegar a alcanzar hasta el 25%.

Aunque en el banco Dinafem Seeds cuentan con uno de los mayores catálogos de semillas de marihuana, tanto de autoflorecientes como de feminizadas, lo cierto es que siempre puede existir alguna genética que echan en falta quienes acuden a ellos en busca de las mejores plantas para su cultivo. Para intentar englobar la más amplia oferta, sus ‘breeders’ se han puesto manos a la obra para crear una variedad que ha conseguido conquistar a los cultivadores y consumidores de Estados Unidos, y que cuenta con un enorme reconocimiento a nivel mundial. Hablamos de Gorilla.

Se trata de una variedad que hunde sus raíces en la saga Chem, de la que obtiene muchas de sus características. No obstante, para obtener esta nueva genética no han recurrido solamente a esta familia californiana, sino que a la Chem Sister han sumado la Chocolate Diesel y la Sour Dubb. El resultado, una planta de marihuana que, sin duda, dejará fascinados a todos los cannabicultores amantes de las índicas más resinosas.

Con una presencia de CBD reducida a la mínima expresión (tan solo del 0,1%), los niveles de tetrahidrocannabinol se pueden llegar a disparar hasta alcanzar el 25%. De hecho desde Dinafem Seeds advierten que su efecto sumamente potente no es apto para todos los públicos. Como buena variedad Indica, notaremos como Gorilla nos golpea más física que mentalmente, con un agradable y duradero efecto relajante ideal para combatir problemas con el insomnio o la ansiedad.

Cargada de resina

Una de las principales virtudes de la Gorilla de Dinafem es su capacidad para producir resina, algo que se ve reflejado en la cantidad de tricomas que acaban por recubrir sus flores y hojas. Esto provoca que sus cogollos resulten tan pegajosos como apetecibles para los más golosos, pues la apariencia es similar al efecto de haber espolvoreado azúcar glas sobre ellos. 

Para conseguir estos buenos resultados (y que de nuestras semillas de Gorilla lleguen a brotar rendimientos de hasta 1000 gramos por planta) no es necesario dedicar grandes esfuerzos. Es sencilla de cultivar y no resulta caprichosa en cuanto a los cuidados. Solamente tendremos que encargarnos de suministrarle agua y nutrientes de forma regular y sin pasarnos en ningún momento. Dos detalles que debemos tener en cuenta: es una variedad de cannabis que no tolera una sobredosis de fertilizantes pero sí las podas en sus zonas bajas, para lograr que la planta destine toda su fuerza a su parte superior.

Y pese a que las apariencias traten de engañarnos (su tamaño mediano y sus internudos medios dejan claro que se trata de un híbrido) nada más probarla se descubre su marcada predominancia Indica, con aromas y sabores que evocan a las Chem y a la Diesel de las que proviene, con notas de cítrico que golpearán nuestro paladar al tiempo que lo hacen ciertos toques ácidos de gusto terroso. 

Sus orígenes: la Gorilla Glue, una Indica híperpotente

Los antepasados de esta genética, que ahora ha sido magistralmente actualizada por los ‘breeders’ de Dinafem Seeds, se encuentran en una variedad que acabó por enamorar a toda la comunidad cannábica de Norteamérica y que surgió, como surgen las mejores cosas, fruto de la casualidad. La culpa la tuvieron los cultivadores Joesy Whales y Lonie Watie, que sin querer se convirtieron en los autores de Gorilla Glue, una semilla que presentaron en la Cannabis Cup que tuvo lugar en la ciudad de Los Ángeles en 2014 y que, acto seguido, se disparó como la espuma. 

Quiso la casualidad que las plantas que Joesy tenía de la variedad Chem Sister se volvieran hermafroditas y acabasen polinizando otras que tenía en su cultivo de Sour Dubb. Para evitar males mayores, actuó como marcan las reglas: eliminando esa cepa para prevenir contratiempos a posteriori. Quien no fue tan cauto fue su colega Lonie, que decidió guardar algunas semillas procedentes de esta polinización accidental. La historia vino a corroborar que esa fue, sin duda, una de las mejores decisiones que había tomado en su vida. 

Al poco tiempo plantaron esas semillas que habían guardado y de las mismas brotó una variedad de marihuana con unos niveles de THC inusitados: si bien la mayoría se encontraban en el 25%, había algunas que alcanzaban el 30%. ¡Una pasada! 

Además, al igual que ocurre con la Gorilla de Dinafem Seeds, se trataba de una gran productora de resina. Tanto es así y tal era la cantidad de tricomas que recubrían sus flores y la calidad de los mismos, que de ahí surgió su nombre original. Y es que, nada más tocar su nueva creación acababan pegados a ella y, una vez que la fumaban, se pegaban también al sofá y no había quien los separase por culpa de su potente efecto.

Así llega ahora al catálogo de Dinafem Seeds la variedad Gorilla, una semilla de cannabis sencilla de cultivar, no demasiado exigente para los cannabicultores más novatos, pero capaz de producir resina en grandes dosis y con un efecto devastador. Como el manotazo de un gorila.

Ficha técnica de la Gorilla de Dinafem Seeds

  • Sexo: Feminizada
  • Genotipo: 60% Indica / 40% Sativa
  • Cruce: Chocolate Diesel x Chem Sister x Sour Dubb
  • Cultivo recomendado: Interior y exterior
  • Floración en interior: 58-63 días
  • Producción en interior: 500 g/m2
  • Cosecha en exterior: Mediados de octubre
  • Producción en exterior: 1000 g/planta
  • Altura en exterior: 3 m
  • THC: 25%
  • CBD: 0,1%
  • Ratio THC/CBD: 250:1