Ya es el momento del cambio. De la misma forma que las leyes de los países están abriéndose al consumo del cannabis, el cine y la televisión deben acompañar en esta transición para eliminar los prejuicios que aún perviven en la sociedad. Estas son las exigencias de los participantes en una encuesta, que reclama a la industria de Hollywood que abandone el personaje del típico fumeta despistado, perezoso y solitario, con el fin de empezar a reflejar lo que realmente ocurre. Como en la encuesta, en la que el 86 % de los participantes tenían un trabajo a tiempo completo y muchos de ellos contaban con unos ingresos anuales bastante elevados.

Cómo olvidar a personajes de ficción tan legendarios como The Dude (‘el Nota’ en castellano), protagonista de la película ‘El Gran Lebowski’, o al gamberro de Ted, el oso de peluche que cobró vida por un deseo de su dueño John y que ahora campa a sus anchas por la ciudad de Boston flirteando con chicas y fumando cannabis. Aunque en la gran pantalla nos deslumbraron y nos regalaron risas, aparecían representados, como tantos y tantos personajes de película que consumían marihuana, como holgazanes, distraídos y, por qué no, algo sinvergüenzas. En definitiva, una imagen que nada tiene que ver con la realidad del consumidor de cannabis del siglo XXI, puesto que hoy consumen desde estudiantes hasta desempleados, pasando por todo tipo de profesionales e incluso políticos.

Tanto es así que los usuarios que por uso medicinal o por puro placer consumen marihuana en la vida real están clamando contra la industria de Hollywood para que abandone los estereotipos que han sido representados en el cine y en las series a lo largo de las décadas pasadas. Estas peticiones coinciden con desapariciones como la de la serie ‘Disjointed’, de Netflix, donde la protagonista era una defensora del consumo de cannabis que había cumplido su sueño de tener un dispensario. Protagonizada por Kathy Bates, ha sido cancelada tras su primera temporada.

Una encuesta de la agencia de investigación neoyorquina Miner and Company acaba de mostrar la opinión de la comunidad cannábica, que pide a los productores y guionistas de la industria hollywoodiense que contribuyan a cambiar la percepción que rodea a las personas que, por uno u otro motivo, consumen marihuana. Sienten que mientras aparezca en los medios dominantes la imagen de fumeta asociada a los prejuicios habituales será mucho más complicado que la sociedad llegue a aceptar el cannabis y puedan surtir efecto todos los pasos que se han dado en las últimas décadas en pro de la legalización. 

Además, por si es poco, fueron los propios encuestados los que explicaron por qué debía producirse ese cambio. De los participantes en la encuesta, todos ellos consumidores de cannabis y ciudadanos de aquellos estados donde está legalizada la marihuana para uso medicinal o lúdico, un 86 % reconocía trabajar a tiempo completo e identificarse como profesionales, activos, apasionados y relajados. Y de todos ellos, un 77 % aseguraba ganar más de 75.000 dólares (más de 64.000 euros) al año.

El poder de los medios de comunicación

“Los medios de comunicación han desempeñado un papel increíblemente importante en la aceptación social del consumo de cannabis, pero aún queda trabajo por hacer”, explicaba Robert Miner, presidente de Miner & Co. Studio. “El mismo estereotipo del fumeta inofensivo y bobo que impulsó la normalización se ha convertido ahora en un obstáculo para la aceptación de los consumidores productivos y comprometidos de cannabis”.

Por si quedase alguna duda al respecto, Miner apunta que la televisión juega un papel clave a la hora de guiar los cambios sociales y, por lo tanto, la evolución de la conversación sobre un asunto a lo largo del tiempo. De la misma forma que, como él apunta, los perfiles cómicos en su día “ayudaron a impulsar la legalización y la normalización”, ahora la realidad ha ido más allá de la representación que Hollywood ha hecho. Si bien las gracietas surtieron efecto en su momento, en este momento esas historias humorísticas pueden provocar un estigma negativo.

Y todos estos factores acabaron por quedar patentes en la encuesta. 7 de cada 10 participantes aseguran que los medios de comunicación y sus mensajes son claves a la hora de conformar la imagen que la sociedad tiene del cannabis y también al generar unos estigmas u otros. El mismo porcentaje, además, reconocía que era mucho más sencillo conversar con alguien de forma amigable sobre la marihuana después de ver algún personaje de ficción, siempre y cuando este no fuera retratado como un bobo.

Uno de los comentarios más utilizados por muchos de los participantes en la encuesta (hasta 8 de cada 10 hicieron mención a este detalle) es que tanto en la pequeña como en la gran pantalla el uso del cannabis debería ser tratado de la misma forma que lo es beber vino, cerveza o un cóctel. En este sentido, entre los encuestados más jóvenes, aquellos con edades entre los 21 y los 38 años, la opinión mayoritaria (73 %) era que en las series o en las películas preferían ver a alguien consumiendo cannabis que bebiendo alcohol. De la misma forma, eran muchos los que pedían contenidos de ficción en los que se contemplase el cannabis medicinal como una opción médica legítima y positiva.

En definitiva, el mensaje es claro: trasladar a la ficción, ya sea a la televisión o al cine, aquello que realmente ocurre en la realidad. Ese es el mensaje que han querido mandar los consumidores de cannabis a la industria cinematográfica. Si no, habrán perdido una gran parte del público: como reflejaba también esta encuesta, eran muchos los amantes del cannabis que reconocían ser ávidos consumidores de televisión y más después de haber fumado un poco. Así que, Hollywood, ya sabes lo que tienes que hacer.