Un trabajo realizado por investigadores de la Universidad de Alicante sugiere que los compuestos que otorgan a la marihuana sus propiedades, los conocidos como cannabinoides, pueden retrasar la muerte de las células de los ojos causada por la retinosis pigmentaria. El estudio se suma a un buen número de publicaciones científicas que demuestran los beneficios del cannabis medicinal para conservar la salud de los ojos y tratar otras enfermedades degenerativas como el glaucoma.

Ver con efecto tubo o tener dificultades para distinguir los objetos por la noche son algunas de las consecuencias tempranas de la retinosis pigmentaria, una enfermedad degenerativa causada por un conjunto de alteraciones genéticas que afectan a la capacidad de la retina para responder a la luz que puede llevar, con el tiempo, a un estado de ceguera total.

Las células fotorreceptoras de los ojos de las personas que padecen este problema se van destruyendo poco a poco, aunque no todos los casos evolucionan de la misma manera. Frecuentemente, los afectados se van adaptando a la pérdida de estas unidades que absorben la luz y no detectan la enfermedad hasta que esta se encuentra muy avanzada.

Desgraciadamente, no existe ninguna cura para quienes sufren esta alteración que afecta a una de cada 4000 personas a nivel mundial. Sin embargo, algunos estudios publicados recientemente sobre las propiedades médicas del cannabis suponen un rayo de esperanza para las personas que sufren enfermedades como la retinosis pigmentaria y otras relacionadas como el glaucoma y que, por ello, notan cómo su agudeza y su campo visuales merman sin remedio con el paso del tiempo.

Un salvavidas para las células

Uno de estos trabajos, realizado por investigadores de la Universidad de Alicante, sugiere que los cannabinoides de la marihuana, entre los que se encuentran más de 80 moléculas como el THC y el CBD, son potencialmente útiles para retrasar la degeneración de las células oculares causada por la retinosis pigmentaria.

Los científicos llevaron a cabo experimentos para observar el impacto que estos compuestos químicos tenían en la visión de roedores ciegos. Para ello, separaron a un conjunto de ratas en dos grupos: mientras que a uno le administraron cannabinoides sintéticos, el otro no recibió ningún tipo de tratamiento durante el periodo que duró el estudio.

Después de tres meses en estas condiciones, los expertos comprobaron que aquellos animales que habían recibido los cannabinoides presentaban un 40 % más de receptores de luz en sus ojos que aquellos que no habían tenido contacto con estas moléculas.

No obstante, y aunque los resultados son prometedores, aún son necesarias nuevas investigaciones antes de sacar conclusiones definitivas con los datos obtenidos, ya que los expertos no han sido capaces de determinar con exactitud aún cómo los cannabinoides pueden retrasar la pérdida de visión en pacientes con problemas oculares degenerativos.

Sin embargo, tanto los avances derivados de este trabajo como de otros estudios relacionados suponen un importante progreso hacia el tratamiento de enfermedades como la retinosis pigmentaria que hasta ahora la medicina tradicional no ha conseguido curar.

Otro buen número de investigaciones en este área se ha enfocado en estudiar los efectos neuroprotectores de los cannabinoides con el fin de prevenir la pérdida de visión y mejorar la salud general de los ojos. Uno de los trabajos más recientes, publicado por científicos del Instituto Neurológico de Montreal el año pasado, demuestra que estas moléculas abundantes en la marihuana mejoran la visión en condiciones de luz tenue aumentando la sensibilidad a la luz de las células de la retina. Sus resultados sugieren que el cannabis podría utilizarse en el tratamiento de las enfermedades degenerativas oculares.

Los resultados de un estudio anterior, esta vez firmado por expertos de varios centros de investigación de Baltimore (Estados Unidos), indicaban que, además de mejorar la visión, los cannabinoides actúan como agentes neuroprotectores y antioxidantes que contribuyen a aumentar las posibilidades de que las células de los ojos sobrevivan.

Marihuana para paliar el glaucoma

Asimismo, este tipo de compuestos químicos, que también produce nuestro propio cuerpo, podría ser utilizado para paliar los efectos del glaucoma. Esta enfermedad degenerativa afecta al nervio óptico, el encargado de enviar la información visual al cerebro, por lo que el daño que provoca puede causar pérdida de visión y ceguera.

Uno de los factores desencadenantes de este problema es la hipertensión ocular, es decir, el aumento excesivo de la presión que ejercen los líquidos dentro del ojo contra la pared de este. Aunque en la actualidad existen algunos tratamientos enfocados a reducirla, como gotas oftalmológicas, tratamientos láser o cirugías, no siempre son efectivos, o pueden tener efectos secundarios perjudiciales para el paciente.

Sin embargo, el cannabis medicinal sería una alternativa a estos procedimientos. Según una investigación de científicos de la Universidad del País Vasco publicada en 2010, el sistema endocannabionide del organismo humano tiene un papel fundamental en la regulación de la dilatación o constricción de los vasos sanguíneos de los ojos.

Los investigadores, que apostaban por buscar nuevos horizontes terapéuticos ante la inexistencia de tratamientos realmente efectivos para el glaucoma, descubrieron que el THC y el CBD disminuyen la presión intraocular. El hecho de que los cannabinoides contribuyan a reducirla los convierte en buenos candidatos para desarrollar nuevos tratamientos contra esta enfermedad.

La idea de que la marihuana sea útil para tratar el glaucoma no es actual, sino que se remonta a la década de 1970, cuando una serie de estudios demostraron que fumar marihuana disminuía la presión intraocular en pacientes con glaucoma. Otros trabajos posteriores, respaldados por los institutos nacionales de salud de Estados Unidos, evaluaron si la marihuana o el THC eran efectivos para mantener bajos los niveles de tensión ocular.

Estas investigaciones revelaron que cuando se fuma cannabis o se toma su compuesto activo, ya sea en forma de pastilla por vía oral o como una inyección, disminuye la presión intraocular durante unas horas, un efecto reconocido por la Sociedad Estadounidense de Glaucoma.

Aunque aún tenemos que esperar para ver unos resultados verdaderamente concluyentes, la ciencia avanza cada vez más en la investigación de las propiedades del cannabis y en el uso de la marihuana medicinal como una terapia alternativa a los tratamientos tradicionales de algunas enfermedades.